LA REALIDAD, ENTRE LO VERAZ Y VEROSIMIL (CORRELATO DEL PERIODISMO)

David Mamani Cartagena


Partiendo de un concepto simple definimos la realidad como “todo lo que existe y es perceptible o no perceptible por el hombre”; entendiendo la percepción como una función fisiológica. En el sentido de “no perceptible”, se aplica a la interpretación subjetiva o abstracta de cualquier individuo conformada por su sistema de valores culturales, sociales, morales, religiosos, etc.

Esta “realidad” constituye la causa para una serie de confusiones y dudas que vale la pena aclarar ante la lectura de publicaciones acaecidas en la red que hacen referencia a lo que hoy se llama periodismo.

“El periodismo es la actividad de recolectar, elaborar y publicar información relativa a la actualidad, especialmente a hechos novedosos de interés social y público. Para obtener esa información, el informador debe recurrir a las fuentes periodísticas”.

Fuente: Wikipedia

En síntesis, la información actual, de interés público declarada por una fuente y publicada por algún medio masivo de comunicación, es periodismo.

Recordando mis lánguidos días en la academia, pensaba en el periodismo impartido, denominado a conveniencia mía, de la “vieja escuela”. La famosa pirámide invertida y sus siete corrientes preguntas: ¿qué?, ¿quién?, ¿cuándo?, ¿dónde?, ¿cómo? y ¿por qué? Dichas interrogantes intentan ordenar la información de mayor a menor importancia, complementándose con el titular, el “lead” y el cuerpo restante. Este recurso del ejercicio periodístico se aplica netamente para la escritura de la noticia.

Como ejercicio literario (referido a la expresión a través de la palabra escrita) el periodismo abordó diversos géneros y estilos, dependiendo del contexto histórico. La discusión llega a estas alturas para definir una corriente denominada “Nuevo periodismo”. La disputa reflejada en dos artículos puede ser leída y discutida en las siguientes páginas:

http://diseccionandomusas.blogspot.com/2008/01/al-diablo-con-las-categoras.html

http://comunicadorescolegiados.blogspot.com/2008/01/de-un-tal-evo-y-el-nuevo-periodismo.html

Como bien definió Javier Rodríguez, periodista cultural, mediante un bizarro (osado) titular: "Al diablo con las categorías", reproduzco:

“El Nuevo Periodismo, desde una perspectiva histórica, corresponde a la escuela literaria que nació cabalgando la contracultura, durante las transformaciones de la década del sesenta, y que se apoderó del periodismo con esquemas conceptuales modernos, aproximándose a la realidad con una ventaja que el devaluado periodismo, miope y reduccionista en su praxis, no contaba”.

“El Nuevo Periodismo es todavía un tema urticante en círculos puristas (por su tendencia a vulnerar el precepto “sagrado” de la objetividad), cuando en realidad se trata de un periodismo que asume su real naturaleza subjetiva, compartiendo con el lector el juego entre verídico y verdadero, entre verosimilitud y contextura narrativa, que usualmente se purgaba en el fuero interno del redactor. Rescatando la importancia del quién y el cómo, incluso por encima del qué, al momento de construir el mensaje periodístico, queda claro que para practicarlo se necesita ser mejor estilista que transcriptor”.

Asumiendo esa naturaleza subjetiva aludida por Rodríguez, queda retomar la temática del presente artículo; la realidad, entre lo veraz y verosímil.

La estética en cuanto al mensaje, el discurso o el texto del periodismo raya en la dualidad veraz y verosímil, dependiendo de la intención del estilista.

Entendiendo la realidad como un todo, una de las partes de esta realidad constituye esta representación o aproximación abordada por el periodismo.

¿Dónde encaja lo veraz y verosímil en el periodismo?

Tomando en cuenta esa objetividad que defienden los puristas, es obvio que estará sujeta a lo veraz en el marco del interés general y actual hacia el lector. Al contrario, lo verosímil se ubica en la utilización de recursos literarios (ficción, simulación de la realidad o hiper realidad) que abstraen la comprensión del lector hacia el discurso producido por el estilista. Tampoco se descarta la veracidad de los hechos por la verosimilitud, es decir la forma en que éstos fueron narrados.

“Lo que se conoce como ‘periodismo objetivo’ es una contradicción en sus propios términos... Los problemas humanos son secundarios”.

Hunther Thompson

Vale la pena aclarar que la veracidad está presente en otros canales no oficiales, es decir fuera de la mass media, que incluye un nuevo ejercicio periodístico veraz y verosímil del autor, citando como ejemplo el fenómeno del blog.

Blogs personales que narran hechos veraces en el universo del autor (fuente propia de información) que si bien están fuera del interés colectivo, comprenden a su vez la calidad verosímil. Invito a leer los siguientes ejemplos:

http://joseantonioprado.blogspot.com/2007/02/mi-primera-multa.html
http://the-stranger-.blogspot.com/2007/12/trivia.html